María Clara Zea candidata a Magíster en Construcción de Paz de la Universidad de los Andes, Colombia. Investigadora en Elementa DDHH y BA en antropología en la UdeA. Es co-autora del libro Desintoxicando Narrativas: desafiando esteotipos de mujeres y drogas, y fundadora de la Mesa de Política de Drogas Medellín.

Esta ponencia presenta un estudio de caso de la ciudad de Medellín, donde históricamente las personas que usan drogas han sido objeto de estigmatización y exclusión en los espacios sociales y públicos. Esta marginalización se ha intensificado bajo el régimen prohibicionista, limitando su acceso a espacios seguros de consumo y socialización. Basada en la investigación "Derechos en Contexto Medellín: drogas y disputas por el espacio público" (2024) de Elementa, la ponencia destaca un hallazgo: los riesgos asociados al consumo de drogas están profundamente mediados por complejas intersecciones de poder, estigma y resistencia. Estas interacciones se dan tanto con actores estatales como no estatales, afectando las dinámicas de inclusión y exclusión en la ciudad.

A través de un enfoque de metodologías anidadas, que combina análisis de datos, entrevistas y trabajo de campo, se examinan las dinámicas de riesgo a las que se enfrentan las personas que usan drogas, como la violencia policial, el control territorial por actores armados y discriminación tanto familiar como comunitaria. Estos riesgos se experimentan de manera diferenciada, ya que el enfoque interseccional revela que factores como las trayectorias de consumo, la clase social, el género, la raza y la edad determinan los niveles de estigmatización y violencia. En este contexto, los grupos más vulnerables son las personas empobrecidas, racializadas, mujeres y jóvenes, quienes sufren un impacto desproporcionado.

Finalmente, la ponencia resalta la importancia de investigaciones aplicadas a escala local para descomponer los efectos del prohibicionismo, permitiendo identificar con mayor precisión los actores que interactúan con las personas que usan drogas, los contextos de consumo y las formas de control espacial que se han establecido. Además, ejemplifica desde la voz y experiencia de personas usuarias, sus prácticas de resistencia y cuidado que reflejan agenciamiento y su lucha por ejercer su derecho a habitar y acceder a la ciudad.